¡Unos locos de Sibaté, Cundinamarca!

“Un mundo dentro de otro un mundo”, comenta: (Carlos Álvarez, 2016), así describe el Centro de Salud Mental de Sibaté que hoy 12 de septiembre pasará a la historia entre encuentros fríos y lluvioso con un amor… Un camino lleno de trancones propios de la corrupción y una entrada al Municipio con la gran laguna  anteceden el histórico recinto, igualmente instituciones represoras a lado y lado, (Academia de Policía, asilos y retiros), lugares de represión.  

- Al bajar del bus un resbalón augura atención.
- ¡La plaza principal no puede estar sin su iglesia! 

El doctor Mariano y los compañeros emocionados caminan... Desde la plaza principal tomamos un bus de vuelta para el célebre recinto que abrirá los sentidos a un grupo de alma que buscan otras formas de luz.

Al bajar, el resbalón ahora fue para Milena. La fachada del lugar parece de un cementerio… El Centro Masculino Especial la Colonia, Síbaté; abre las puertas; un lugar tan arcaico como la mismisima Sor Cecilia, quién resulta ser la directora. 
- Gracias a ella pudimos ingresar. 

Ahora debemos pagar el favor con algo de silencio, donaciones, palmaditas en la espalda y chocolates… Las puertas de par en par, se llenan de los primeros enfermos mentales; los cuales allí ,les nombran internos, esto suena a un sistema carcelario similar a alas ideas de Foucault.
- Un poco reservados, con sigilo nos acercamos a saludar.
-  Gonzalo y sus profundos ojos azules saluda tantas veces que nos confunde.
-  Hola, hola, hola, hola...  

Participamos tres grupos,  caminamos pegaditos hacia el interior y mientras cierran las puertas en silencio indago: -  ¿Volveré a salir?

Dentro se siente  frío; de hospital no tiene fisonomía. Al seguir caminando, vienen hacia nosotros otros internos, la teoría de Lombroso es latente. - Unas particulares cabezas impresionan. Unos caminan de manera extraña, todos los internos tienen una especie de uniformes, sudaderas de color azul o verde y tenis negros y tienen rapadas sus cabezas.  

La escena puede parecer como un viaje a Auzwicht. - ¡Alucino luego existo! – La psicosis comienza a invadirnos mientras Carlos Álvarez, nos guía; conoce de física, al verle pensamos que era un doctor… Refiere llevar 40 años internado. -  Un hombre de metro ochenta.

Nos comenta detalles históricos y no logro entender por qué está acá, nos acompaña y en su frente izquierda aparece una bola. Posiblemente sea un tumor o puede ser la secuela de la terapia electro-convulsiva. Varios internos presentan esa característica, toda una cicatriz de Ugo Cerletti.

Recorriendo los pabellones, pasamos por San Miguel, allí, se encuentran los viejos, la gran mayoría son discapacitados y asistidos en lo más básico: (Comer, orinar y defecar). Dentro de San Miguel nos solicitan, no tomar fotos, ni grabar. Hacer esto es contraproducente para la Institución, los profesionales y la buena moral de doña Sor… Entonces caminamos hacia otro pabellón.

Lo religioso es dogmático, persiste una iglesia y viven las monjas… El próximo pabellón es el de pediatría le llaman Niño Jesús; allí  hay niños pero son grandes... Aquellos que físicamente son adultos pero mentalmente tiene la edad de niños de 5 a 10 años. Niños especiales, señores que babean. 
Algunos usan cascos a la razón que son epilépticos y en los ataques puenden lastimarse la cabeza. Salimos del Niño Jesús para la cancha de microfútbol y fuimos esectadores de las Olimpiadas, donde los delegados de la Gobernación de Cundinamarca y de la Alcaldía de Sibaté registran sus acciones con fotografías. 

Fotografía: Aldemeyer González

- ¿A esos delegados les presenta la realidad? Me preguntaba desconcertado… Puede que a veces el mejor escenario se convierta en el espacio para la consecución de donaciones y cielos… Personal de aseo, cocina y mantenimiento resultan siendo enfermeros. Allí necesitan toderos, dentro de las actividades, hicieron un juego de roles y ordenados como fichas de ajedrez por subgrupos desfilan presentando lo más simbólico de cada región colombiana:
-   Locos de Antioquia pasan con su arepa y frijoles. Pacífico y sus pescados. Cundinamarca y sus sopas. 
Durante el desfile alaban al alcalde, esté arreglo las calles. -  ¡Sor muy atenta y regañona agradece!

Llega un interno carismático, vigoroso saluda a Mariano y le dice: -  Hola papi, usted es mi papi…
- Nos saluda a todos dándonos la mano. - Se mueve y habla no como loco, parece ñero. 

Me asusta al querer robar mi reloj, pero el sólo juega… Saluda a Milena y al ver sus muletas le dice en tono fuerte y atrevido: - ¡Ah cuatro patas! - Muertos de risas le reforzamos.

Finalmente saludo a Félix y le dice: -  Ah, como el gato Félix.
-  Se despide como si se fuera del Centro, o eso nos hace creer.

Después de presenciar el delirio, una llovizna hace que los internos de la cancha y nosotros nos refugiemos. -  ¿Se ahogó la olimpiada? Pregunta Félix.

Mariano nos invita a pasar por el pabellón de esquizofrenia… - ¡Ya confundo mis compañeros con los internos!

Los sentidos hoy se han puesto a trabajar, pues el olor me tiene mareado; huele a viejo, una mezcla de mierda, orina, moho, pañales, axila, medicamentos, religión, caño y árboles… - Quiero vomitar…

Dentro del pabellón de esquizofrenia, la enfermera nos comenta sobre la medicación. Sus comentarios no resultan siendo aportes, percibimos falencias. Hay un interno que ingresó por tener delirios sobre el estado y los gobernantes. Refiere toda una alineación que va en contra de nosotros, por ello se le condenó como esquizofrénico.  -  Una muestra clara qué pensar es peligroso.

Le solicitamos a Marino ver los internos más complejos. Refiere no querer alimentar nuestro morbo. Pero nos comenta la historia de un interno que se incrusta agujas en todo su cuerpo y nos lo presenta. -  Paradójico su morbo.

Fuimos a dejar las mini donaciones y como si fuera película de terror nos recibe una habitación oscura, con un interno encerrado, su puerta tiene un enorme candado y la ventana es una enorme reja, y allí: “Los psicólogos latinoamericanos nos hace falta un buen baño de realidad, pero de esa misma realidad que agobia y angustia a las mayorías populares” (Martin-Baró, 1998). -  Al mostrarle aquél encerrado, mi amada se asusta... 
-  Me acerco a él sin temor, le saludo, no me contesta nada. -  ¡Veo una cara triste! 

Un practicante en su internado, decidió llevarnos hacia las celdas. Asustado fuí; nos separamos de Mariano y los otros compañeros, las celdas son habitaciones con una cama muy pequeña, sin closet, sin tv y sin baño, con una ventana de abarrotes y una puerta en hierro con un pasador por fuera.

Al ver las celdas, alucino con los alojamientos religiosos. -  Altares, bellas y limpias alfombras con puertas y contrapuertas. No halaré nada de la doble moral; en un cuarto grande pueden dormir 30 a 40 internos y el tratamiento religioso parece seguir dominado la ciencia, es decir  Cristomicina y culpa para todos. Dicho tratamiento es propio de prisiones y manicomios, se trasfiere elementos a la conciencia individual, es decir  se hace responsable al enfermo de su curación, (Foucault, 1976).  

Ante estos tratamientos no sabemos sí allí, exista la rehabilitación. Varios compañeros percibieron que allí, únicamente el loco espera su muerte. - Quedé pensando en Carlos, él me dice que allá es un mundo dentro de otro mundo. Dos realidades que se contraponen  y no sé qué mundo elegir.  -  Adiós, leeré sobre Einstein y Steven hacking mi hermano.

Envuelto en emociones... Nostalgia, tristeza y sonrisas, mi escrito puede tomarse como una denuncia. - ¡Qué tiemble la Beneficencia, los voy a acusar! - No sé, si con mi madre, con la Defensoría o con la deidad…

Sería higiénico, callar, no quiero me den un cupo extra por pensar diferente, pues el loco parece ser aquel que va en contra del sistema, ese que no está bien adaptadito. - Ya que pude salir, corramos... - Hasta pronto Sor.

Referencias bibliográficas

Arvalez-Uria. Sociología de las Organizaciones, capítulo 7, ¿Para qué sirven las cárceles?, pg. 137- 152.

Ignacio Martín-Baró (1998), Acción e ideología, Psicología Social desde Centroamérica, UCA editores, Universidad Javeriana, pp. 1-51. Recuperado el 03 de enero de 2017 en http://www.uca.edu.sv/coleccion-digital-IMB/wp-content/uploads/2015/11/1983-@-Acci%C3%B3n-e-ideolog%C3%ADa-psicolog%C3%ADa-social-desde-centroamerica.pdf

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Mayor información, Alcaldía de Sibaté, Cundinamarca: 

http://www.sibate-cundinamarca.gov.co/Paginas/default.aspx 


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