Reencuentro inesperado de almas


¿Alma mía eres tú? – Trenzas con mirada infantil…

 Alma sanadora, vestigios detrás de un cuerpo que no dejamos de estudiar, pedazos fragmentados en partículas que aún los grandes científicos no logran rechazar; sin embargo incrédulos no conciben lo intangible. Espacios inconscientes que tienen su estudio en una popular pseudociencia… Análisis de la mente arrastrada de otras vidas. 

- Presencia no consciente que se intenta borrar, dejando su huella. 

Rastros lumínicos. Luchas entre muertes y vidas, espacios de no conciencia, ausencias de amor. Células, ADN, neurotransmisores y otros, comprueban que las emociones y pensamientos desarrollan o no enfermedades, se recomienda dejar a un lado los vicios del alma. 

Desde la historia del origen del mundo y del humano, nos peguntamos por nuestra existencia; los filósofos clásicos  no dudan el tema y exponían tipos de alma.  - Mientras tanto veo tu reflejo... 


Fotografía: Yaneth Silva

Principios divinos te renombran: - ¡No te vayas alma mía! No dejes este cuerpo sin esencia. Sin ti el cuerpo no tiene vida, sin ti el todo es un vacio.

Creemos milenariamente en un espíritu interno que nos gobierna, es un desafío de materia vs antimateria. Siendo seres de luz, la existencia tiende a trascender, entidad encarcelada e inmortal para algunos… Alma como razón, esencia, espíritu, atributo, dimensión, invención y aspiración. 

Juegas a esconderte; códigos secretos;  donde hoy las imágenes diagnósticas te dejan ver…

¿Alma mía eres tú? – Trenzas con mirada infantil…

Subjetividad que no escapa de los radicalistas teóricos frente a la objetividad, pues a la larga todo lleva algo de alma

- Un nuevo péndulo está listo para la hipnosis. Se balancea entre formas y colores; la atención se focaliza y el túnel aparece… Alma y cuerpo se separan.

-        Escucho, huelo y veo la sala de reanimación.
-        ¡Hola alma mía!

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