Escribiendo dentro del autismo
No
sé cuantas partes necesite para desahogarme. Tengo tantos miedos, tanta mierda.
Con cada mes aumenta la demanda de escritos. Empiezo a tener un RECONOCIMIENTO.
El blog, resulta la mejor manera de consolar emociones y pensamientos. ESCRITOS AUTISTAS es el blog de
escritos de un mortal con TRASTORNO DEL ESPECTRO AUTISTA. Que escribe desde su
mundo, busca cuestionarlo todo. No cree en la certeza, juega con la duda.
Sugestiona síntomas con un toque de humor y presunto pensamiento crítico. ¿Dónde
está el pensamiento crítico?. Digo mi verdad sin reparo, sin moral, sin dioses,
sin culpa, sin consecuencias. Naturalmente esa SINCERIDAD ATREVIDA que me caracteriza.
Aquella sinceridad que nunca nos enseñan, la mayoría reprime.
Todos
los días es una constante batalla conmigo mismo. No quiero interactuar con
nadie, no quiero escuchar o hablar en el trabajo, en la universidad y con la
familia. Parece ser una oclofobia. Anhelo únicamente escuchar mi voz. Pocos (a)
me comprenden. Quiero encerrarme en mi apartamento de por vida; jamás volver a
ver la naturaleza, las personas, el mundo, ese mundo que no es el mío. Que
frustrante resulta ser así. Mi adaptación social, me brinda estrategias para
continuar. Soy un gran hipócrita. Las habilidades comunicativas y escritas no
me dejan entrar en PSICOSIS. No temo a la dementofobia.
Frecuentes
alucinaciones me muestran mi realidad, no la de los demás. En las alucinaciones
me encuentro conmigo mismo, espacio acogedor. La fantasía infantil es un
refugio. Con malestar convivo con mis padres, familia, personas y sociedad. Mi
resistencia es contra todos (a). Aun no he enloquecido. Macondo suele
enloquecer. Los escritos contienen realidad y ficción. En su interpretación
esta la realidad. Todo el tiempo son una mezcla de todo.
Envejeciendo
aprendo como mitigar mis comportamientos autistas. El RECONOCIMIENTO lo espero,
me gusta ser el centro del mundo, de mi mundo. Todo ha cambiado. Las flores en
la universidad me motivan, debo interactuar, compartir y hablar con el otro,
sólo quiero hablar del otro, es decir hablar de mi yo y mi súper yo. En mi
narcisismo autístico pretendo ser inmortal. Buscando inmortalidad, llego la
escritura.
Aunque
los recuerdos me persiguen. Puedo dormir con calma, he sido un buen cristiano.
Nunca he podido alejarme del conocimiento. De maneras extrañas educarme es una
sombra. La agresividad juvenil persiste. Me cansé de esperar lo que nunca
llegó. Mi hermano nunca se recuperó. Las secuelas son enormes. Temor de tener
hijos y una enorme angustia de ser padre. Envidia y celos de ver hermanos (a)
juntos. Ya puedo escribir pensando en él sin llorar atacado. Hago rutinas para
no pensarlo tanto, olvidarle es imposible. ¿Cómo olvidar mi único hermano?.
Fotografía: Fotos Rubio
Actividades psicofísicas me hacen afrontar
todo de mejor manera. Aeróbicos y gimnasio movilizan. Intento dejar atrás lo
que nunca se puede, la infancia. Superando presuntamente la adolescencia. Que
mierda de secuela vivir. En mi adultez
estoy estable, eso presumo. Quizás una gran mentira. ¿El dolor termino?. A lo mejor todo está peor y el dolor es más
punzante. Mi hermano en su profunda
PSICOSIS ya no resulta un motivo para vivir. ¿Por qué vivir por él?. Busco
nuevos motivos para no agudizar mi ideación suicida. De forma odiosa el AMOR,
no me deja morir. El amor resuelve mi acrofobia. No temo a la monofobia, pero
eres la única persona que quiero junto a mí. Continúo en tratamiento. Confieso
que en la locura y en la muerte encontraré mi cura.
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