¡Juventud en silencio, vejez con achaques!

Como por estas tierras no han llegado las ciencias, seguimos explicando todo fenómeno con la frasecita: 

- “El diablo anda suelto” 

Algunos ya entienden otras perspectivas del ser humano, la psicología puede ser un pequeño camino, donde no todos caben, y muchos ni siquiera les interesa, atribuyen que su llegada es exclusiva para “locos”. Pero: 

- ¿Quién es el loco acá? 

Las relaciones del cuerpo y la mente son amplias. Doña Martica lleva años (póngale 30) yendo a su médico; conoce innumerables especialistas, más de cinco diagnósticos, y jamás ha encontrado la cura a sus síntomas. 

- ¿Alguna vez ha pensado ir a un psicólogo? 

Esta pregunta parece un despropósito, se tiene la radical idea que la enfermedad es solo orgánica, y entonces: 

- ¿Qué pasa con lo psicológico? 

Nuestras emociones y pensamientos, esas penas que cargamos, eso que nunca decimos en el hospital. Martica supera los 62 años de edad y sus achaques son constantes: (artritis, hipertensión arterial, diabetes, dolor de rodillas y migraña), décadas con padecimientos donde ningún medicamento ha logrado algo significativo.

Fotografía: Aldemeyer González

Reservada ha callado sus penas; un buen día caloroso se encontró con un intrépido joven que rompe sus dogmatismos. Le comentó de la relación que existe con sus síntomas; le conto: 

- Su merced sencillamente padece un (Síndrome de la abuela esclava). Usted está cansada de la sobrecarga física y emocional, no es justo que tuviera que mantener todo el hogar, criar 8 hijos y ahora terminar de criar sus nietos (5 menores).  

Básicamente no es feliz con su vida, por décadas mantiene un malestar que hoy por fin lo pasó por la palabra.

Ansiosa, triste, sin motivación y hasta con ideación suicida sigue esperando que los medicamentos le den todas las respuestas; permítame la invito a mi consultorio. 

- Tener muchas obligaciones, cuidar hijos y nietos y nunca expresar sus sentimientos, le hace somatizar, su cuerpo y mente no son bobos, si su mente no habla, su cuerpo lo hará, por ello sus cinco diagnósticos.

Sometida culturalmente le invito a que deje de ser esclava, líbrese de cargas que no le corresponden, busque verdadero afecto, amplié su red de apoyo, aún puede ser feliz. 

En terapia estamos trabajando el estrés, la frustración; cambiando lo físico y lo psicológico. 

- ¡Tenga cuidado como mujer con todas las cargas que se le imponen! 

El síndrome planteado es exclusivo de mujeres mayores. Si se siente cargada, cansada, acongojada, decepcionada y hasta sin ganas de vivir no dude en llamar: 3178531877.